Madrid, verano de 1947. Emilio, botones del hotel París, junto con sus compañeros Tomás y Javier, serán los protagonistas principales encargados de transportarles en una aventura enmarcada en tiempos de posguerra, repletos de anhelos, penas e ilusiones.
La novela se fortalece con guiños de Historia, convirtiéndola en una grata experiencia donde América es la meta de sus sueños.