Fátima Casanova brilló con su obra “Las recetas de la cocinita de Fati sin gluten” (Punto Rojo Libros), resaltando la innovación culinaria para celiacos en un encuentro literario que celebró la diversidad
En un fin de semana rebosante de letras y cultura, la Feria del Libro de Ferrol ha brillado una vez más como faro de encuentro entre autores, lectores y amantes de la literatura. Desde el 19 hasta el 21 de abril, la plaza de la Constitución se convirtió en el epicentro de la actividad cultural gallega, acogiendo a escritores, editores y entusiastas de las letras en un evento organizado por la Federación de Librerías de Galicia y seis librerías locales.
Entre las figuras destacadas que hicieron de esta feria un evento memorable, destaca la presencia de Fátima Casanova, autora del exitoso libro “Las recetas de la cocinita de Fati sin gluten” (Punto Rojo Libros). Su participación en el evento no solo atrajo a numerosos seguidores, sino que también puso de relieve la importancia de la gastronomía libre de gluten en el panorama culinario actual.
El domingo 21 de abril, mientras la Feria del Libro entraba en su última jornada, los asistentes tuvieron el privilegio de encontrarse con Fátima Casanova en la caseta de la Central Librera de Real. Allí, entre ejemplares de su libro y una atmósfera de entusiasmo literario, Casanova compartió su pasión por la cocina y firmó ejemplares de su obra para sus seguidores.
“Las recetas de la cocinita de Fati sin gluten” no solo son una deliciosa colección de platos aptos para celíacos, sino también un testimonio del talento culinario de Casanova y su dedicación a proporcionar opciones sabrosas y saludables para aquellos que siguen una dieta sin gluten. Su presencia en la Feria del Libro de Ferrol no solo enriqueció el evento, sino que también destacó la importancia de la diversidad en la gastronomía y la necesidad de opciones inclusivas para todos los paladares. En un mundo donde la comida es más que una necesidad, sino también un puente cultural y un lenguaje universal, la obra de Casanova resuena como un ejemplo de cómo la cocina puede unirnos y nutrirnos, sin importar nuestras restricciones dietéticas.