Por primera vez sacan a la luz su libro El caballo del Diablo, un trabajo que ha durado más de 11 años concluir y que desvela incógnitas hasta ahora nunca esclarecidas sobre los enigmas relacionados con el párroco Bérenger Saunière y Rennes-le-Château.
María Cruz Narro Monja ha dedicado toda su vida a la enseñanza, tanto en Primaria como en Secundaria (en esta última, impartiendo clases de Lengua y Literatura), en Madrid. Nació en La Rioja. Allí se empapó de las sensaciones vitales que transmite la contemplación de la Naturaleza. Su alma se llenó de colores, de aromas, de rocío y de escarcha; de tormentas, de tierra mojada y de arcoíris. En esta obra describe los paisajes de su tierra natal y centra la acción en Cuculla, el pico más alto de Ezcaray, en la sierra de La Demanda. Por su trabajo y sus crudas circunstancias familiares, no le ha sido posible desarrollar su vocación literaria. Lleva unos meses disfrutando de la jubilación de relevo y le ha faltado tiempo para escribir su primer libro infantil. Sus libros de cabecera son «El Quijote» y «El Principito». Este último le influyó grandemente en el desarrollo de su personalidad desde la adolescencia. Define a los niños como seres sinceros, muy listos y agradecidos. Afirma que a ella le han devuelto siempre el ciento por uno de lo poco que les haya podido aportar. Trabajar con niños le resulta un reto diario maravilloso. Lo que más agradecen es una mirada afectiva, una sonrisa sincera y un… ¡ánimo, tú puedes! Su frase preferida: «Solo los niños saben lo que buscan». El principito. Antoine de Saint Exupéry.