Incluir verbos en una narración es necesario y útil. Pero hay que saber hacerlo. Los tiempos verbales no han de usarse de manera azarosa. El tiempo verbal a utilizar variará en función de lo que quieras lograr: nivel de tensión, escena intrigante, apego del lector, etc.
El tiempo verbal a emplear variará en función de cuál sea la intencionalidad del texto. Por lo general, las narraciones dan un mejor resultado cuando los verbos se conjugan en pasado, haciendo de la escena un proceso en el que el lector se va embaucando.
El tiempo presente, con gran carga energética, tiene una mayor presencia en las narraciones policíacas, o en textos judiciales, informes, etc.
¿Puedo mezclar tiempos verbales?
Si. Pero teniendo siempre claro tu objetivo e intencionalidad. Hay que hacerlo con cautela y evitando las transiciones bruscas, esto solo causaría el desconcierto del lector.
En definitiva, los verbos agilizarán tu narración, pero también tenemos para evitar el descontrol de las escenas y el desconcierto del lector. Es el lenguaje el que debe adaptarse a tus intenciones, tú trabajas con el lenguaje, no este contigo.