Fotógrafo mediocre, soltero, sin compromiso, metido en los cuarenta años, sin aspiraciones en la vida ni a nivel profesional ni personal, recibe, casi al mismo tiempo, dos noticias que le harán cambiar su percepción de todo lo que le rodea y que le hará replantearse su existencia, hasta el punto de que su vida sufra un giro de ciento ochenta grados. El Santo Crucifijo es una historia que narra una historia paralela entre el pasado y el presente donde una complementa a la otra y donde nuestro personaje principal, Jorge Márquez, se ve envuelto en ella, sin saber bien porqué motivado por su forma de vida y su salud, en fase terminal. Alrededor de Jorge existen una serie de personajes que hacen que dude de casi todo el mundo y donde solo su instinto le haga confiar en determinadas personas.
Me llamo Guillermo Domínguez Fabián (Sevilla, 1966) casado, dos hijos. Aunque El Santo Crucifijo no es mi ópera prima, sí que era una de las asignaturas pendientes que tenía a nivel personal. Es un proyecto que inicié hace ocho años (2010) pero por circunstancias personales no pude culminar hasta este año pasado. Mi intención es dar a conocer mi obra, escrita desde y con el corazón, y dando un pequeño homenaje a mi barrio, a mi ciudad y a mi gente. El creer en ello es solo cuestión de Fe.
Cuando decidimos expresarnos comunicando nuestro conocimiento, de la mano de la palabra escrita, estamos dando paso a una nueva forma de vida o a una nueva manera interpretar un determinado hecho. Publicar un libro, en cierto modo, nos hace inmortales. Nuestras palabras sobrevivirán a nuestro tiempo en esta tierra. Tu libro, mientras exista, estará ahí para recordarte. Y tú siempre estarás vinculado a él de forma eterna. Porque amas a la literatura y porque la literatura te ama a ti, lo que quieras decir, hazlo saber con un libro.