«El poeta sevillano ha construido un estilo propio que cautiva al lector por su radicalidad y ternura, sencillez y complejidad, y también por su actualidad. Si en La diagonal (2014) resuenan las voces de Lorca («Beso de luna»), Silvia Schujer («Barco de papel»), Antonio Machado («Invierno en Soria») o de las greguerías de Ramón de la Serna («El cuento dentro de cuento solo es un cuento embarazado»), en Volver al horizonte (2017), las intertextualidades se entretejen y se hacen estructurales esenciales en la composición de cada poema»
Marcos Vázquez Consuegra (Sevilla) es arquitecto técnico, y actualmente desempeña esa profesión. Comparte su dedicación a la Arquitectura con su amor a la Literatura. Ha publicado varios poemarios magníficamente acogidos por la crítica y el público como Miradas convocadas (2002), Entre paréntesis (2012), La diagonal (2014) y Volver al horizonte (2017). La crítica ha señalado sobre estos poemarios su «radicalidad y ternura, sencillez y complejidad, y actualidad»
Ahora, con El pandeo de la memoria (2018), el autor se sumerge en el proceso creativo a la vez que extiende su mirada a lo cotidiano los políticos, la ciudad o la emigración, sin olvidar aquellos problemas o estados consustanciales a la persona la incomunicación, la muerte, lo espiritual o el amor, entre otros.
Cuando decidimos expresarnos comunicando nuestro conocimiento, de la mano de la palabra escrita, estamos dando paso a una nueva forma de vida o a una nueva manera interpretar un determinado hecho. Publicar un libro, en cierto modo, nos hace inmortales. Nuestras palabras sobrevivirán a nuestro tiempo en esta tierra. Tu libro, mientras exista, estará ahí para recordarte. Y tú siempre estarás vinculado a él de forma eterna. Porque amas a la literatura y porque la literatura te ama a ti, lo que quieras decir, hazlo saber con un libro.